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Todos los años, al llegar estas fechas, las aguas del río Skokomish se desbordan de su cauce y obligan a los salmones a sortear todo tipo de obstáculos, incluida una carretera comarcal. Entre los meses de noviembre y diciembre, los habitantes de esta zona del estado de Washington (EEUU) se han acostumbrado a ver a estos animales nadando a través del asfalto, hasta el punto de que su odisea que se ha convertido en una especie de tradición.

En la fotografía, uno de los salmones cruza decidido la carretera. Detrás, una docena de ejemplares espera el momento oportuno. Muchos de ellos tendrán éxito en su aventura río arriba. Otros morirán por el camino. [Via: Arbroath]